La fe es la constancia de las cosas que se esperan, la comprobación de los hechos que no se ven.
– Hebreos 11:1
Sin embargo, alguno dirá: “Tú tienes fe, y yo tengo obras”. ¡Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras!
– Santiago 2:18
Es semejante a un hombre que, al edificar una casa, cavó profundo y puso los cimientos sobre la roca. Y cuando vino una inundación, el torrente golpeó con ímpetu contra aquella casa y no la pudo mover porque había sido bien construida. Pero el que oye y no hace es semejante a un hombre que edificó su casa sobre tierra, sin cimientos. El torrente golpeó con ímpetu contra ella; en seguida cayó y fue grande la ruina de aquella casa”.
– Lucas 6:48-49
No temas, porque yo estoy contigo. No tengas miedo, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, y también te ayudaré. También te sustentaré con la diestra de mi justicia’.
– Isaías 41:10
El día en que tengo temor yo en ti confío.
– Salmos 56:3
Y sin fe es imposible agradar a Dios, porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que él existe y que es galardonador de los que le buscan.
– Hebreos 11:6
El miedo que presentía me ha sobrevenido; lo que me daba terror me ha acontecido.
– Job 3:25